- Equilibra el cuerpo y la mente.
- Balancea devolviendo la seguridad en uno mismo.
- Relaja los nervios, estabiliza las emociones, ayuda a las personas a recobrar su centro.
- Disipa pensamientos turbios y negativos y sentimientos de opresión.
- Ayuda a que los problemas fluyan, evitando el estancamiento.
Acción sobre la piel:
- Promueve la salud y belleza de la piel, regenerando y regulando su oleosidad e hidratación.
- Posee efectos hidratantes.
- Posee efecto refrescante.
- Ideal cuando estén pasando momentos de nerviosismo, inseguridad o miedo al cambio.
- O cuando invaden los celos y uno no puede controlar el sentimiento posesivo sobre el otro.
- Ideal cuando tenemos que tomar decisiones y estamos frente a una disyuntiva.
- Ideal cuando sentimos un nudo de nervios en el estómago y necesitamos recobrar la armonía y desprendernos de lo que nos está molestando.
- A nivel piel es ideal para pieles desnutridas y resecas por sus propiedades hidratantes y para regular las pieles oleosas.
- Como complemento puede mezclarse con una crema de rostro.
- Compañero ideal: Un complemento perfecto es el Aceite de Geranio, " el aceite de la mujer ya que también posee propiedades equilibrantes que ayudan a transitar los cambios de la mujer".
- Ideal durante una convalecencia cuando el cuerpo lucha por recobrar su equilibrio y recuperarse del agotamiento.
Combinaciones sugeridas:
- Aceite de geranio, naranja, bergamota, limón, neroli, manzanilla, lavanda y menta.
- Baño de espuma de hipérico y naranja amarga.
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